martes, 5 de agosto de 2008

De Port Balís a Saint Raphael (Francia)

Dia 24 de julio de 2008, salimos de Port Balís a las 15.00 h UTC, aproximadamente.
El barco es un Furia 372 y el Patrón y Armador Pere Mateu, yo le acompaño de tripulante en el traslado, Pere empieza las vacaciones y debe encontrase con su familia, que llegarán en unos días por tierra, en coche.
Llevábamos una hora y media navegando, con el barco puesto ya a son de mar, puestas las velas , con un poco de motor, verificado el rumbo, la bañera ordenada y despejada de cabos y drizas..., el viento nos entra por la aleta de estribor, navegamos a 7 nudos, y el piloto automático va haciendo su trabajo, decidimos abrir el bimini, pues el sol nos da de lleno en el cogote, estando por la labor, de repente, el barco orza, orza, orzaaaaa, la rueda da vueltas como una loca, trasluchamos, quedamos tendidos en la bañera, nos ha cogido de sorpresa, nos incorporamos y le damos standby al piloto, me hago cargo de la rueda y vuelvo a rumbo, nos miramos, ¿qué ha pasado? iba todo perfecto!!!.
Volvemos a poner el piloto, y al cabo de unos segundos, lo mismo, vuelve a orzar, vuelve la rueda a girar como poseída. Después de varios intentos mas, llegamos a la conclusión que el piloto “samuerto”, y digo yo, ¿no podía a ver elegido otro día?
Digamos después de agosto, ¿finalizadas ya las vacaciones?, “posno”.
Quedan muchas millas por delante y muchos días de vacaciones, cuando lleguemos a destino, Pere se encuentra con su familia, y le hará falta la ayuda de un piloto automático. Decidimos volver a Port Balís para repararlo.
Día 25/07/08, son las 8 de la mañana, hora local, ha llegado un técnico con una electrónica nueva, la monta, salimos a calibrar, calibramos y probamos, ESTUPENDO!!! FUNCIONA!!!
Dejamos al técnico en tierra, y nos ponemos de nuevo a rumbo.


Dejando Port Balis.

Llevamos unas 14 horas de retraso, y la ventana que teníamos de buen tiempo para cruzar el Golfo de León, se ha hecho mas pequeña, tomamos nuevas decisiones y cambiamos rumbo.


Entrando por la bocana de Port Vendres, decidimos pasar la noche, paseamos un rato para estirar las piernas, una ducha, cena en el barco y charla, mañana será otro día.

Partimos de Port Vendres a las 0600 UTC, marcamos rumbo a Port de Frontignan, un amigo de Pere le llama y le comenta que por Marsella están soplando rachas de viento de 44 nudos, el parte dice que en nuestra zona, al mediodia, subirá a F5, F6, nos preparamos para lo que venga y nos ponemos a rumbo.

Efectivamente, el cielo empieza a taparse, y el mar empieza a venir cargadito, sube el viento, y como no podía ser de otra manera, vamos ciñendo, embarcamos agua por la proa, suerte que llevamos capota antirrociones, así navegaremos unas cuantas horas, el barco se comporta perfectamente, pasa la ola sin dar pancotazos, hemos reducido trapo y con paciencia vamos haciendo millas.

Después de algo mas de 4 horas, con el cielo nublado y ciñendo a rabiar, vuelve el astro rey a mostrarnos los colores del día, el azul del mar es fantástico!!! El viento rola un poco y nos abre el ángulo, vamos a un descuartelar.














Pere tumbado en popa, tomándose un bañito de sol, que día mas guapo nos ha quedado. Navegamos cerca de tierra, es una pasada, tenemos buen viento, F4 y rachitas de F5, y la mar completamente plana, bueno un poco rizada, es fantástico navegar así, sin ola, y el barco deslizándose suave y rápidamente.

Aquí estoy yo, disfrutando de esta navegada

Entrando en Port de Frontignam


De proa al Bar-Restaurant del puerto, Je je, ya sabemos donde cenaremos esta noche!!!

Partimos a las 4 de la madrugada hora local, del día 27, hoy será un día largo, tenemos que llegar a destino, nos queda la travesía mas larga, mas de 100 millas, yo he dormido faltal, mejor dicho, no he dormido nada, los mosquitos se han cebado conmigo, una vez el barco está en condiciones y puesto a rumbo, le pido a Pere que me deje acostar un rato, realmente esta noche lo he pasado mal, ¿qué tendrá mi sangre que a los mosquitos les chifla?

Última singladura

En esta última singaldura, nos damos cuenta que llevamos un polizón a bordo, me recuerda al año pasado volviendo de Sicilia, en un Hanse 401, llegamos a contabilizar mas de 12 de estos ¿simpaticos? insectos. Pere se entretiene un rato con él haciéndole varias fostos.

La navegación es cómoda y placentera, llevamos el mar y el viento por la popa, solo cuando pasamos enfrente de la desembocadura del Ródano, a unas 5 millas aprox., encuentro el mar desordenado, las olas vienen de cualquier parte, de diversos tamaños y chocan entre si. Sin mas problema, al cabo de una hora aproximadamente, dejamos atrás el desorden.




























































Nos adentramos en la zona de las Illes D'Hyeres, realmente espectacular, las pasamos de largo, no podemos entretenernos, quizás vuelva otro año para disfrutar de sus caladeros, por ahora me conformo en verlas de pasada, es una bonita zona que necesita de su tiempo.

El sol se pone por nuestra popa, y me dice al oido que se va al otro lado del mundo a poner un poco de luz, pero que no me preocupe, que mañana volverá a iluminar el día por aquí.

Entra la noche y seguimos navegando, mientras cenamos en la bañera vamos atentos, es una noche muy tranquila, muy relajada, siento que "mi viaje" llega al final.

El puerto de Saint Raphael tiene dos bocanas, llegamos sobre las dos de la madrugada, hora local, los marineros nos dan un amarre provisional para pasar el resto de la noche, son muy amables y serviciales.

A la mañana del día 28, nos acercamos a Capitanía, papeleo, nos asignan otro amarre, debemos salir de puerto y entrar por la otra bocana, lo hacemos, amarramos, ordenamos un poco el barco, bueno, básicamente lo hace Pere, lo de ordenar y limpiar, dentro de unas horas llega su familia y quiere tenerlo todo a punto. Ponemos el toldo, duchita y oler a limpio, que ya toca, llega su familia, su mujer y sus dos hijos, comemos todos juntos en un restaurant del puerto, es agradable, aunque hace mucha calor, yo me siento muy a gusto y contento.

Al cabo de unas horas Pere me lleva en coche a Niza, debo cojer el vuelo de regreso a Barcelona, para hacer tiempo, paseamos un ratillo por el puerto de Niza, tomamos algo y charlamos.

Agradezco a Pere, y a su familia, por la confianza que me han otorgado y por dejarme compartir con ellos estos dias, y a el "Corsario", que así se llama el barco, la navegada que nos ha ofrecido, realmente un buen barco, Pere, cuídalo que se lo merece.

Aunque ya hace años que navego, a veces pienso que no soy plenamente consciente del privilegio que me ha ofrecido la vida en este aspecto, NAVEGAR, y la posibilidad con ello de conocer nuevas gentes, nuevos lugares, la posibilidad de ir cultivando nuevas amistades, la posibilidad de compartir una afición, que para mi, se ha convertido en una forma de vida.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola marinero!!! Crec que aquesta serà la millor manera de poder saber de tú, perquè no es té mai temps per part meva de fer una trucada. M'agrada el que escrius i suposo que no et farà res que jo de tant en tant escrigui algun comentari. Quin viatge més aventurer!! Si fas port a Cambrils et vindrem a veure i si no ja farem una visita al Port Olímpic.

Anónimo dijo...

Hola jordi
He llegit el comentari i et vull agraïr un cop mes la teva ajuda i col.laboració en la travessia.Estem preparant la tornada amb en Josep Maria (oceanis 44)i sembla que pinta be per creuar dissabte,ja veurem!
Al final vem arribar a Beaulieu i val la pena!El cap Ferrat es precios .La fauna de Mega yates impressiona si be de vegades fan una mica de nosa..

Fins aviat

Pere

Anónimo dijo...

Hola Jordi,

Llegint el teu blog a qualsevol li venen ganes de navegar.
Encara que nosaltres aquest estiu ja ho hem fet: de Barcelona a Genova. Tornant de la nostra ruta per centreuropa hem passat per Monaco, Niza, Saint Tropez, etc. en fi, seguint el teu itinerari però per terra.

A veure quan et va bé i ens ensenyes el Miravent!

Isma

Jan dijo...

Fantàstic relat, gairebé que et sents part de la “tripu”, i les fotos també estan molt maques. Encara sort que li va donar per fallar al pilot prop del port base, no vull pensar en el que podia haver embullat en altra situació i amb mes mar, ja ho diu el refrany....l'electrònica la càrrega el diable, o no era així. Espero que Josep Maria i Pere tinguin una bona travessia de tornada.
No deixis d'escriure, així podem navegar amb tu.
Una abraçada.
Jan.

sguinales dijo...

no me entero de lo que pone en ningun comentario :(